El policarbonato básicamente es un laminado con cámara de aire, altamente resistente, con diversas características: Flexible (permite el doblado en frío) - Resistente a altas temperaturas - Ligero - Óptima transmisión de la luz (ahorrando un alto valor energético) - Concentra el calor debido a su cámara de aire interna (alvéolos) - También posee una alta durabilidad a la intemperie gracias a su tratamiento contra los rayos solares (U.V.)
Es ideal para techos, cerramientos, invernaderos, aleros, ventanas y muchas cosas más, todo esto sumado a su fácil colocación y a su precio accesible. Todas estas particularidades hacen del policarbonato alveolar un material noble con el que se pueden lograr lugares muy confortables y aislados.